4 recomendaciones para saber si tú idea de negocio tiene potencial

4 recomendaciones para saber si tú idea de negocio tiene potencial

El 80% de los emprendimientos no logran superar los 3 primeros años de vida en Costa Rica, esto a pesar de que el país se ha caracterizado por ser uno de los de mayor potencial de emprendimiento en la región.

De acuerdo con César Loáiciga, estratega en Ventas, uno de los factores que provoca esta situación es que los emprendedores muchas veces inician un negocio por necesidad y sin validar realmente si esa idea de negocio tiene un verdadero potencial.

 

“Las ideas de negocio son el pilar de cualquier emprendimiento, más aún cuando esta idea se liga a las habilidades que posee el emprendedor para dar una solución a un problema específico del mercado. Solo así el negocio va a poder destacarse de los demás. Lo que pasa es que normalmente el emprendedor no escucha al mercado y no logra comprender los problemas o dolores que este tiene”, señaló Loáiciga.

 



Ante esto, ¿cómo se puede validar si mi idea de negocio tiene potencial para convertirse en una empresa exitosa? De acuerdo con Loáiciga, para lograrlo se deben seguir 4 pasos:

 

1)      Hacer una lista de tus talentos y habilidades. La única manera de que un negocio pueda crecer es que te intereses por él y si trabajas en las áreas donde puedes desarrollar tus talentos y habilidades sin duda alguna estrás haciendo lo que te apasiona.

2)      Definir cuáles de esas habilidades puedes convertir en un negocio. No todas mis habilidades pueden aplicarse en un negocio, por eso es importante definir cuáles se ajustan más, para lograrlo puedes preguntarte: ¿cuáles de mis habilidades pueden resolver un problema en el mercado? ¿Cuál es el problema que intentas resolver con tus habilidades?

3)      Encontrar quién tiene ese problema que intentas resolver. Acá debes empezar a encontrar a tus clientes, para hacerlo investiga ¿quién o quienes tienen ese problema? ¿Dónde están ubicados? ¿Quiénes son los tomadores de decisión?

4)      Preguntarse cómo puedo vender mi producto. La respuesta a esta pregunta debe generar una estrategia diferencia y que no se tenga que competir por precio sino que el emprendedor pueda diferenciarse por el valor agregado que transmite  a sus clientes. Para lograrlo, ayuda mucho responder preguntas como: ¿cómo puedes vender tu producto? ¿En cuánto puedes vender tu producto o servicio? ¿Cuántas unidades necesitas vender para cubrir tus costos fijos? ¿Con qué frecuencia necesitas venderlos? ¿Cuáles productos o servicios complementan lo que estás vendiendo?

 

“Una vez que se valida la idea de negocio, es más fácil saber si el emprendimiento podrá tener éxito o no. En este punto, también es muy importante hacer una investigación de mercado o tener conocimiento o experiencia previa que te permita tener esa sensación de lo qué necesita el mercado. Acá escuchar realmente al mercado y a los posibles clientes es vital”, indicó Loáiciga.

 

Agregó que hay muchas personas que son excelentes haciendo alguna actividad, pero no saben cómo comercializarlo, por lo que el puno a seguir, una vez validada la idea de negocio, es aprender a vender o concretar ventas para generar ingresos al negocio.

 

“El emprendedor no solo se debe centrar en conseguir la primera venta, sino que el negocio se logra desarrollar con las ventas siguientes de ese mismo cliente; es decir, se debe crear una estrategia para estar presente siempre para ese cliente y fidelizarlo”, afirmó Loáiciga.

 

Para lograrlo, señaló el estratega en ventas, los emprendedores no deben casarse con la idea, sino que deben casarse con el problema o las necesidades del mercado, porque cuando uno se casa con la idea es muy probable que esta caduque o deje de ser útil.

 

“Los emprendedores normalmente no tienen un mayor crecimiento porque no escuchan al mercado y sus necesidades, sino que solo escuchan su propia voz y no ve el problema real que tiene el mercado. Los emprendimientos de éxito se centran en generar valor. Siempre debemos preguntarnos cómo agrego valor y a partir de esa generación de valor cómo puedo ganar. No es un tema solo transaccional, sino que es un tema de transformación”, señaló Loáiciga.